COVID19: AirBnB también sufre el azote del virus
La plataforma de alquileres turísticos sufre el impacto del COVID19. El mercado regresa al alquiler local a medio – largo plazo. Los ingresos de anfitriones a 0€ y, algunas inversiones, peligran.
AirBnB cuyo objeto es transformar las viviendas de alquiler en viviendas de uso turístico, con un valor de aproximadamente unos 300.000 millones de euros y en puertas de salir a bolsa este año 2020, sufre el impacto del COVID19 al igual que el resto del sector.
Como resultado de la prohibición de viajar, el tráfico de turistas a descendido hasta 0. Aquellos inversores o propietarios que ponían a disposición de la plataforma sus propiedades han visto mermados sus ingresos considerablemente. Bueno, más que merma, hablaremos de ingresos cero. De este modo, las inversiones de algunos han quedado abocadas a una ruina inevitable.
De este modo, el mercado del alquiler a largo plazo vuelve a ganar terreno y, consecuentemente, esas unidades inmobiliarias salen del porfolio de AirBnB para adherirse a la oferta local en el mercado de alquiler. Hasta ahora, las ofertas de alquiler quedaban fuera de las posibilidades de la demanda local por los altísimos precios. Lo que sucede, en este instante, es que hay un exceso de oferta que deberá reajustar sus precios de manera irremediable. De lo contrario, el resultado es claro: ingresos 0€.
Otro motivo de preocupación es el tema de la limpieza de las viviendas que, por exigencias de salud pública, deberían acreditar la desinfección previa a la entrada de otros huéspedes. Hacer uso de las viviendas cuando se levanten los respectivas cuarentenas es un riesgo que pocos estarán dispuestos a afrontar (tanto por higiene, como por seguridad e, incluso, por coste). El miedo a que nuevos clientes de las viviendas puedan expandir el virus en las comunidades de vecinos es un elemento de peso a tener en cuenta.
Algunos comentan que, igual, el futuro de la industria turística tendrá un alto grado de política o uso AirBnB. Puede ser, pero nos encontramos en un escenario donde NADIE sabe lo qué pasará, independientemente de lo que puedan prever los especialistas o aquellos que son conocedores. El escenario es del todo VUCA (Volátil, Incierto, Cambiante y Ambiguo) y jamás se ha dado para poder compararlo con alguno anterior. Es bueno tener algún tipo de objetivo (aperturas, destinos, vuelos, etc) aunque, lo que está claro, que reiniciar el tráfico de personas con fines turísticos no va a ser tan fácil como «resetear» el mercado. Ni mucho menos.
Fuente: TheGuardian